Noël Jégou se dirige a los alumnos y las familias del Molière

Queridos alumnos y alumnas, queridas familias.

En primer lugar, espero y deseo, de todo corazón, que todos se encuentren bien y que estén seguros en sus casas. Quédense en casa. Es lo único que podemos hacer para parar la propagación del virus, aunque este gesto parezca poco importante en comparación con el esfuerzo de nuestros sanitarios, fuerzas y cuerpos de seguridad del estado, personal de supermercados, transportistas, etc.

Espero que cada uno encuentre, en esta semana, un poco de descanso bien merecido, después de tres semanas intensas de enseñanza a distancia.

Para los alumnos y alumnas, quiero recalcar aquí, la seriedad con la que se han involucrado en el trabajo propuesto por los profesores: materiales, clases, ejercicios, deberes, clases a través de videoconferencias, vídeos, cuentos, canciones, cuestionarios…

Especialmente, porque las condiciones no son siempre fáciles, lo sé: problemas para disponer de un ordenador que hay que compartir con otro miembro de la familia, conexión a internet o dificultades para entender las nuevas herramientas.

Así que quiero felicitarles por su dedicación y transmitirles lo ¡orgulloso que estoy de ellos!

Los padres y madres, ustedes que también han tenido que involucrarse, sobre todo, cuando los niños y niñas son más pequeños. Somos conscientes, y de eso pueden estar seguros, de la dificultad que tiene el conciliar este acompañamiento escolar con la vida familiar y las obligaciones laborales.

Los maestros y profesores, ustedes son testigos, no han escatimado ni en tiempo ni en esfuerzo para poner en marcha en un tiempo récord, las herramientas de aprendizaje en línea y se han formado sin descanso para adaptar sus clases a estas nuevas plataformas. Siempre, con la preocupación de que nuestros alumnos puedan seguir progresando en sus aprendizajes. Desde luego, todo no puede ser perfecto y vamos a seguir mejorando, tanto en herramientas informáticas, como en el ritmo de trabajo transmitido a los alumnos. Por ello, es la continuidad escolar de sus hijos e hijas, de nuestros alumnos y alumnas lo que nos une.

Los aprendizajes continúan, bajo otra forma, es cierto, una forma excepcional, puesto que estamos en una situación excepcional, pero la continuidad pedagógica está asegurada y el personal trabajando. Una situación excepcional es difícil para todos y cada uno de nosotros: padres, alumnos por supuesto, personal e instituciones.

Mi labor como director del Lycée Molière de Zaragoza, junto con Muriel Fabre en primaria, Pilar Ruiz en secundaria, y todo el equipo del Molière, es la de armonizar y asumir, de la mejor forma posible, todas las dificultades generadas por esta crisis sin precedentes: dificultades económicas para algunas familias, continuidad pedagógica y seguridad escolar para los alumnos, condiciones laborales para el personal y también la sostenibilidad de la institución.

Todo ello es compatible, siempre y cuando nos centremos en lo esencial, en lo que forma el ADN de l’AEFE, de la MLF en particular y del Molière por supuesto: nuestros valores. Los valores de laicidad, de fraternidad, de tolerancia, de respeto y de solidaridad.

Los momentos que estamos viviendo son difíciles para todos, pero algunas familias se encuentran más afectadas que otras y el Lycée Molière pondrá en marcha toda la solidaridad de la que pueda disponer para ayudar a los más afectados de nuestra comunidad.

Por este motivo, hemos creado un dispositivo de solidaridad en conjunto con los centros de la red de España de la MLF y los más de 50 dossiers de las familias del Molière están siendo y serán estudiados, con el objetivo de acompañarles en esta situación tan difícil.

Es esta solidaridad la que deseamos poner en marcha. El objetivo es concentrar, los pocos ahorros de funcionamiento (electricidad, gas, agua, contratos diversos, anulación de formaciones, reuniones…), que hemos podido realizar, especialmente en las familias más afectadas, en vez de dividirlos en una ayuda generalizada que sería simbólica y que no ayudaría en realidad a nadie. Para nosotros es la única solución justa y equitativa. Responde a la problemática planteada. Sin embargo, no dejamos de trabajar y continuamos buscando tanto a nivel del Lycée français Molière, como a nivel de la red de España y de la MLF, medidas para acompañar de la mejor forma posible a nuestras familias dentro de esta tempestad.

Por este motivo, para las siguientes semanas, se van a llevar a cabo las siguientes acciones:

1. Se pospone dos semanas el pago de los gastos de enseñanza, respondiendo por una parte a una solicitud de las asociaciones de padres, y se pasará al cobro el 20 de abril de 2020.

2. Los gastos de escolaridad de los meses de abril, mayo y junio serán fraccionados para todos en cinco meses: abril, mayo, junio, julio y agosto. Salvo si ustedes desean conservar la forma de pago inicialmente programada. En este caso, lo pueden comunicar a marie-carmen.navarro@mlfmonde.org, antes del 16 de abril de 2020.

3. El pago del importe de la matrícula se pospone al mes de septiembre de 2020.

4. Los gastos de los viajes, ya abonados por las familias de CM2 y de 5ème, se devolverán en la facturación del mes de abril.

5. Las tasas de exámenes, para los 3ème, 1ère y Tle se devolverán en la facturación del mes de abril.

6. Sobre los alumnos de TPS, siguiendo la normativa gubernamental para los alumnos de 0 a 3 años para guarderías y jardines de infancia, se dará la posibilidad de suspender el servicio, a partir del mes de abril para aquellas familias que lo deseen. Deberán informar a Muriel Fabre, directora de Primaria, antes del 13 de abril: muriel.fabre@mlfmonde.org

Una crisis de esta amplitud puede fracturar, puede incluso destruir indefinidamente, una comunidad como la nuestra. Pero puede también, si estamos unidos, reforzarla.

Será el caso, si salimos de esta situación sin que ningún alumno se haya visto obligado a abandonar el Molière, porque sus padres ya no estaban en disposición de poder pagar, y que no hayamos sabido ayudarles de forma individual, atenta y benevolente.

Será el caso, si conseguimos conservar todo el personal que se esfuerza por seguir ofreciendo, a pesar de estas condiciones que nadie ha elegido, un servicio de enseñanza a distancia de calidad.

Será el caso, finalmente, si somos capaces de evitar medidas precipitadas, que harían tambalear el equilibrio presupuestario del centro, ya muy frágil.

Una respuesta generalizada e igual para todos no tiene, efectivamente, ningún sentido, ni en términos equitativos entre familias -que no se ven afectadas de la misma manera por esta crisis-, ni en términos de gestión de una organización, cuyos objetivos no son ni el lucro ni el enriquecimiento.

Efectivamente, con un fin no lucrativo, el Lycée no tiene apoyo de ningún accionista, inversor o fondo que le permitiría, el día de mañana, regular los efectos de esta crisis. Las consecuencias nefastas se reflejarían inmediatamente sobre el empleo, y como consecuencia en la calidad de la enseñanza ofrecida, en el compromiso futuro, y por lo tanto en las condiciones de trabajo de sus hijos.

Sólo juntos podremos salir de esta crisis, seguramente debilitados pero en pie y listos para continuar con el proyecto educativo que ustedes han elegido para sus hijos.

Por nuestra parte, continuaremos trabajando con las asociaciones de padres de alumnos y sus representantes, que nos hacen llegar sus dificultades y trabajan con nosotros para seguir mejorando. Somos conscientes de las dificultades y permanecemos a la escucha de sus solicitudes, pero teniendo en cuenta las posibilidades de nuestro centro.

Continuaremos sin descanso construyendo el futuro de nuestra escuela, de nuestro proyecto y de nuestros valores.

Cuídense, cuiden de sus hijos y si les quedan fuerzas, ayúdenos a cuidar del Molière para que todos podamos, cuando acabe el confinamiento, encontrar el colegio que dejamos hace menos de un mes y que tanto amamos.

Mucho ánimo para todos y todas.

Noël Jégou Director del Lycée français Molière de Zaragoza