Red Alumni Molière [RAM]: Carlos Labarias Gagnière · Promoción ’99 Regresa al colegio después de muchos años. Carlos Labarias es antiguo alumno del Molière, y un miembro más de la nueva Red Alumni Molière. En su época había tantos alumnos como días tiene el año y hoy admira asombrado cómo ha crecido aquel colegio de su infancia en el que tanto aprendió y tanto le ha servido en su carrera profesional. “El Molière es para mí el gran legado de mis padres”, expresa satisfecho. Hoy se dedica a la psicología y la enseñanza. Es emprendedor y valora sobre todo el espíritu crítico que aprendió en el colegio. Lee aquí la entrevista o también puedes verla en este vídeo. ¿Cuándo estudiaste en el Molière? Desde 1984 hasta 1999. ¿Qué estudios cursaste después del colegio? Me fui a Francia a estudiar en una escuela especializada en bicicletas. Porque mi gran pasión eran las bicicletas. Luego me volví aquí y estudié Magisterio y después cursé la licenciatura en Psicopedagogía. ¿Qué significa para ti el Molière? Para mí significa un legado bonito, interesante, enriquecedor y que me ha aportado potencial en mi vida personal y profesional. ¿En qué te ha ayudado el sistema pedagógico que aprendiste aquí? Fundamentalmente, en el espíritu crítico. Yo creo que ésta es una de las fortalezas de este sistema, precisamente. Y el saber francés me ha aportado el hecho de que ahora hay una parte de mi capital profesional que está dedicado al francés. ¿Cuál es tu profesión? Tengo una academia de francés y también soy traductor e intérprete de francés. Y, además, estudié la carrera de Psicopedagogía y he desarrollado un método de toma de decisiones para ayudar a la gente a salir de dilemas personales. Se trata de un método que fusiona razón, emoción e intuición. Y paralelamente a esto, mis padres tienen una pasión, que es hacer redescubrir los sabores de antaño a las personas. Tienen una explotación de almendras artesanales. Como el producto artesanal se aprecia mucho en Francia, he creado una página web en francés para dar a conocer estas almendras: www.amandesdexception.com. En ella explico todo el proceso de elaboración en francés, con las palabras exactas. Y en eso, mi formación me ha ayudado mucho. Me ha ayudado mucho, porque he sabido cómo escribir correctamente, las expresiones. Ha sido muy útil a nivel comercial. ¿Tienes alguna anécdota o persona de la que te acuerdes especialmente? Sí, recuerdo una vez que después de un dictado tuve dos fallos y la profesora, Solange, me puso «très, très, très, très, très bien». Pero no sólo me lo puso, sino que me cogió, me miró a los ojos y me lo repitió. Eso fue muy poderoso. Le tenía mucho cariño a esta profesora. Y luego, el hecho de haber podido hacer mis prácticas de Magisterio con ella como tutora fue muy bonito, volvió a encenderse ese lazo emocional. El haber podido estar con Solange como alumno fue una suerte. Guardo unos recuerdos buenísimos de ella: era una persona cercana y que realmente me entendía.